DIME QUE ESTÁS
Esa expectativa es la causa del cotidiano conflicto emocional.
La falta de certeza de que somos quienes estamos experimentando la vida, nos coloca en un abismo de incertidumbre, cuando no llega el eco de todo lo que está allí afuera.
Y el mismo término nos ayuda a comprender cuando asimilamos el concepto de "afuera".
Cada uno de nosotros somos de naturaleza pensante y-como tales- creadores de ideas luego devenidas pensamientos con desarrollo para irradiar -finalmente- una ilimitada cantidad de imágenes.
Ellas buscarán su espejo sin el cuál no sabrán quiénes son e irán interactuando en una multiplicación infinita de posibilidades hasta que por fin, no recuerden su procedencia.
De pronto, un creador de ideas, es decir: cualquiera de nosotros; un día deja de preguntarse por lo que está en su frontera de vida; comprobando que ha olvidado el paradero del propio ser observador.
En ese instante de profundo caos interior ya no buscamos, sino que en propicia calma esperamos la única certeza posible que emerge del vacío: el re-encuentro con nuestra esencia espiritual y a ella va la expectativa del "dime que estás".
Graciela Khristael (10-11/ Enero 2013)
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