Aquellos que seguimos andando por el camino de las preguntas tanto como de las respuestas antiguas, nuevas y constantes, sólo podemos reconocernos falibles, imperfectos, vulnerables así como -muchas veces- desorientados.
Es en tal reconocimiento acerca del "uno mismo" en donde se encuentra el principio de la íntima verdad que no invita a confrontar ni a promover falsas expectativas, porque si acaso la muerte visitara hoy a la vida, podríamos haber partido en medio de la mayor falacia, que es habernos mentido a nosotros mismos.
Con Amor,
Graciela Oasis del Alma. Khristael
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