Honestidad y Belleza Interior.
No te des por vencido.
Parece que todo es igual, todo mezquino, extensamente dual, incapaz de ser verosímil, pero no te des por vencido
Aunque los poemas parezcan ser sólo metáforas, no lo son; son verdades enredadas en las letras para que los sabios del amor descubran eso que llamamos belleza interior. Hay veracidad allí que te dice: no te des por vencido.
Hay una humanidad andando, entre la quietud de las sombras y las luces del sonido; silenciosa a veces, dolorosamente quejosa en ocasiones, indiferente, estratega y escurridiza; pero también hay una humanidad que se ha escabullido quién sabe cómo de tantos artilugios y logró sobrevivir a través de los siglos para decirte: no te des por vencido.
Creer en los otros es como apostar al auto-engaño y ser perdedor desde la primera jugada, porque primero debes creer en ti y así sabrás que pase lo que pase allí en tu periferia; no harán que te des por vencido.
Cada día despertarán los fantasmas de tus verdugos para hacerte doblar las rodillas ante tu espejo, pero también amanece con cada sol que siempre está en el mismo sitio el recuerdo de tu Conciencia para ayudarte a soltar esos miedos y permanecer en la convicción de que no debes darte por vencido.
Te darán técnicas, te hablarán al oído con murmullos de adoración al ego; provocarán tu sufrimiento, aumentarán tus dudas pero no sabrán qué más hacer para acabar con la belleza de tu Ser y con tu honestidad cuando puesto de pie en tu Alma sostengas que no te darás por vencido.
¿Quién te dice esto?
Quien te escribe.
Quien tantas veces necesita lo mismo que tú:
Correr el velo de la incertidumbre para verificar que la Luz que nos hace ser lo que somos, no puede jamás darse por vencida.
Con Amor,
Graciela González (Khristael)
www.facebook.com/oasisdelalmakhristael
Parece que todo es igual, todo mezquino, extensamente dual, incapaz de ser verosímil, pero no te des por vencido
Aunque los poemas parezcan ser sólo metáforas, no lo son; son verdades enredadas en las letras para que los sabios del amor descubran eso que llamamos belleza interior. Hay veracidad allí que te dice: no te des por vencido.
Hay una humanidad andando, entre la quietud de las sombras y las luces del sonido; silenciosa a veces, dolorosamente quejosa en ocasiones, indiferente, estratega y escurridiza; pero también hay una humanidad que se ha escabullido quién sabe cómo de tantos artilugios y logró sobrevivir a través de los siglos para decirte: no te des por vencido.
Creer en los otros es como apostar al auto-engaño y ser perdedor desde la primera jugada, porque primero debes creer en ti y así sabrás que pase lo que pase allí en tu periferia; no harán que te des por vencido.
Cada día despertarán los fantasmas de tus verdugos para hacerte doblar las rodillas ante tu espejo, pero también amanece con cada sol que siempre está en el mismo sitio el recuerdo de tu Conciencia para ayudarte a soltar esos miedos y permanecer en la convicción de que no debes darte por vencido.
Te darán técnicas, te hablarán al oído con murmullos de adoración al ego; provocarán tu sufrimiento, aumentarán tus dudas pero no sabrán qué más hacer para acabar con la belleza de tu Ser y con tu honestidad cuando puesto de pie en tu Alma sostengas que no te darás por vencido.
¿Quién te dice esto?
Quien te escribe.
Quien tantas veces necesita lo mismo que tú:
Correr el velo de la incertidumbre para verificar que la Luz que nos hace ser lo que somos, no puede jamás darse por vencida.
Con Amor,
Graciela González (Khristael)
www.facebook.com/oasisdelalmakhristael
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