MEMORIAS DEL PASADO.
Muchas veces nos encontramos ante la sensación de que algo más que nosotros se encuentra en determinado lugar...El miedo, la ansiedad, cierta angustia y la incertidumbre acerca de no saber qué hacer con ello, nos conduce por vías tan variadas e inverosímiles como la vida misma. De allí que resulte tan importante hacer algunas distinciones respecto del enfoque que damos a sucesos vinculados con las memorias de quienes habitaron un determinado lugar.
Datos incontables relatan desde hace miles y miles de años tanto leyendas, como historias de familias transmitidas por generaciones, cuentos con descripciones de personajes míticos y los tan sabidos relatos de fantasmas. Es esta la razón por la que existen en todas las culturas que han recorrido y presencian aún la vida planetaria entre quienes -desde luego- nos encontramos los mortales de hoy; técnicas, prácticas diversas, rituales y enfoques múltiples acerca de cómo resolverlo o al menos establecer un patrón de comprensión sobre este asunto.
La tarea del alejamiento de espíritus o presencias en determinados sitios (en ocasiones no sólo refiere a viviendas sino a espacios geográficos, coordenadas o cruces de las llamadas líneas Hartman), les compete a Maestros espirituales, Sacerdotes, Chamanes, Gurúes, Kahunas, Monjes y Sanadores en general pero aquí vale detenerse en un apartado de este tema:
LA PROPIA CASA. EL PROPIO LUGAR:
Cada persona recorre un camino en su vida no sólo hecho de cosas sino de historias, personas, emociones, encuentros y desencuentros; ingredientes todos ellos que interactúan con las experiencias de otras personas, con los paisajes, los objetos y los lugares en común, dejando en todo momento -instante tras instante- una huella en un espacio cuya imagen vamos perdiendo a medida que dejamos atrás el instante anterior.
Nuestra vida deja una estela, una marca, una huella si se quiere ver de ese modo, por la que pueden recorrerse los acontecimientos a través de las múltiples técnicas conocidas e incluso muy pronto pueda ser a través de las propias ondas gravitacionales.
Entre tanto, es importante reconocer que nuestro paso pisa el camino de otros así como los otros recorren de algún modo nuestras huellas.
El lugar que habitamos, el vehículo que conducimos, el espacio en el que nos expresamos cada día, tiene algo de nuestro perfume así como el aroma de la energía de otras personas; tiene nuestro sonido de alegría y de los enojos; tiene la música de los que andan o pasaron por allí.
No es necesario pensar en castillos abandonados o lugares habitados por personas involucradas con actividades nefastas; es suficiente con reconocer que mientras estamos viviendo, el 100% de nosotros es nuestra responsabilidad, ya que indefectiblemente nos tenemos a cargo (sea física, mental o espiritualmente).La propia casa es nuestro lugar; externo e interno.
La propia casa es el sitio que habitamos por el tiempo que sea y también es el cuerpo físico que custodia el alma de nuestro templo interior.
SER TÚ - 100%
Al conectarnos estrechamente con el lugar que habitamos (la casa de todos los días, el negocio nuevo, la casa que heredamos de un familiar, el sitio en el que nos alojaremos por un tiempo, etc), podemos lograr un mejor acercamiento de nuestra propia energía hacia dichos lugares si acaso comprendemos que es nuestra historia, que hay algo que nos lleva a esa coordenada, que todo nos enseña, nos recuerda, nos invita a reparar, nos propone reconstruir, nos inspira a mejorar.La calidad de vida mejora cuando nos volvemos realmente conscientes de nuestro rol como experiencia humana; cuando somos capaces de observar los pensamientos que nos conducen a tantos actos contradictorios que también dejarán su huella en el espacio-tiempo y algún otro alguna vez se encontrará con esa memoria de energía.
Conectando nuestro Ser con el lugar y sumando a nuestras palabras un vehículo energético como es este Suplemento Vibracional "Ser Tú - 100%", síntesis de de las frecuencias de varios elementos de la naturaleza como los son el Hibisco Blanco, minerales y rocas, gemas e incluso piedras meteóricas de cósmica procedencia; podemos alcanzar un estado de armonía comprensiva -no mágica- entre nuestro hábitat y quienes somos. Una gota, tus propias palabras y un solo símbolo como arquetipo universal.
LIMPIAR Y RECUPERAR LA ARMONÍA.
Con una gota en cada esquina de los ambientes de tu casa o negocio; en los muebles, objetos, incluso con una sencilla aplicación en cuadros, fotos y demás artículos que forman parte de tu momento presente, acompañada de las palabras que vibren en sintonía con tu esencia de Ser, resultando las más simples y aceptadas desde la difusión de la técnica de sanación kahuna (práctica del Ho'oponopono): Lo siento, perdona, gracias, te amo, alcanzarás un diálogo perfecto entre tus anhelos y el sitio en el que te encuentras.SUPLEMENTO VIBRACIONAL
USO EXCLUSIVAMENTE EXTERNO
AMPLIA VARIEDAD DE APLICACIONES.
* * * ELABORACIÓN A R T E S A N A L * * *
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